Ilustración de Raquel Blueblue.




Los páramos sudan
mercurio en las muelas, 
refrigeran neutrinos en agosto.

Niños destrozan a Edipo, 
nunca un tiro en parábola tan certero.
Una nalga glacial abrasa a la otra.

Vietnam y Rhodesia yuxtapuestos
colorean las cutículas
de simbiosis externa
en sentido inverso.


Poema con Raquel Blueblue.

Bombay Beach

 Ilustración de Raquel Blueblue.

Los pájaros de cemento
mastican el olor de la mañana
a queroseno quemado.

La chica en bikini
con un mechero zippo.

Nuestro día llegará

Unos Levi's del 92 manchados de cava.
Himenópteros mordisqueados, inútiles.
Un señor travestido sin idioma ni ejército.
Un corsé.

Irlanda ya no es una isla,
está llena de chinchetas de colores.

La carne que acecha



"El canibalismo es una de las manifestaciones más evidentes de la ternura"
Dalí.

Vendaje de orquídeas,
de jodidas células sin disciplina
enloquecidas de amok.

Artillería de lesbiana,
deslumbra cómo carreras ilegales
de crepitares de pecho.


Polución nocturna,
última erección de arterias y algunas venas.

Goterones de músculo en la tierra.

Un 20 de febrero en plena Guerra Civil.

Avalancha

Fotografía de Raquel Carnicer



Y arriba el Everest vestido de sangre,
un vestido blanco repleto de sangre.
Las sienes rotas más crudas que nunca.
Una cuchilla de afeitar cae al suelo. Un grito.
El sonido de un Mustang que acelera.
De fondo una canción de cuna.
Nanas de sangre,
la misma sangre con la que pintabas tus labios.

Empezamos



Vuelve a quedarse congelado en enero, cómo los sueldos.
En stand by, símil de autómata en desuso.
No hay sólo lockout en la NBA.
Con esa maleta apática que no quiere deshacerse.
En el tour se quedó la gravilla de la carretera.
La chupa de cuero de bolsillos rotos y un bloc de pocas hojas.
En la ciudad de las ambulancias se cerraron las persianas.
Las ratas brotan cómo coágulos de sangre.
Un tren que va directo al cajón de madera.
Esperan en la puerta de la taberna que cierra.
Los cuerpos mellados con sus vestidos nuevos.
Le llamaban Esperanza, y la mataron.